La presidenta Cristina Fernández clausuró hoy las
Jornadas Monetarias y Bancarias 2011, organizadas por el Banco Central de la
República Argentina. “No hay sustentabilidad de los modelos económicos, si no
hay sustentabilidad social”, afirmó la jefa de Estado.
La presidenta Cristina Fernández clausuró hoy las
Jornadas Monetarias y Bancarias 2011, organizadas por el Banco Central de la
República Argentina, durante un acto realizado en el Hotel Four Seassons, de
la Capital Federal. Acompañaron a la jefa de Estado, el ministro de Economía,
Amado Boudou, la ministra de Industria, Débora Giorgi, la titular del Banco
Central, Mercedes Marcó del Pont, y el secretario general de la Presidencia,
Oscar Parrilli.
La presidenta Cristina Fernández aseguró durante
su discurso que “la desigualdad del ingreso ha sido una de las causas de las
crisis que atraviesan las teorías que ocuparon las décadas pasadas”. En ese
sentido, remarcó que este año la crisis “tiene su mayor visibilidad en
Europa”
“La revisión de las teorías monetaristas que se
aplicaron en los ’90 e implosionaron en 2001, es uno de los elementos que
utilizamos siempre para explicar qué había pasado en Argentina”, aseveró. Y
remarcó que en esa época, “era muy difícil escuchar a un economista hablar de
desigualdad. Siempre se referían a balanza de pagos, deuda, intereses. Lo más
importante que ha ocurrido en estos tiempos, es que debemos saber que la
desigualdad es un desastre social, pero además es un disvalor económico”.
Refiriéndose al caso de la crisis en Grecia, la
Presidenta consideró que “la reestructuración tarde o temprano, vendrá”. Y
advirtió que “cuanto más se demore la solución del problema, más terrible va
a ser la crisis como ya ocurrió en 2001” en Argentina. “Lo terrible es que
viendo a un enfermo con los mismos síntomas, se quiere utilizar los mismos
remedios que mataron al otro enfermo”, resaltó.
Cristina Fernández sostuvo que “los llamados
heterodoxos somos más ortodoxos que otros. Si uno observa las tesis del
liberalismo, una de las claves del capitalismo está en el consumo. Y todas
las recetas están centradas en recortar el consumo, que afecta a los sectores
populares, y finalmente a toda la economía”. “La aparición de los gigantes
asiáticos, donde se producen las manufacturas; y además la incorporación de
millones y millones de personas, a la costumbre de comer; debería llevarnos a
advertir que han aparecido nuevos actores y nuevos elementos que requieren
nuevas soluciones”, puntualizó. Pero, pese a ello, criticó que “se insiste en
programas de ajuste que creo que van a ser muy nocivos. Esperemos que lo
adviertan a tiempo y puedan corregirse”.
Yendo al ejemplo de la salida de la crisis por
parte de la Argentina, la jefa de Estado señaló que la quita en la deuda
soberana que practicó el país “tiene una explicación económica. Se nos decía
que no era ético no pagar las deudas. Tampoco resulta ético que se le
quisiera cobrar a nuestro país tasas usurarias, y pretender no asumir una de
las reglas clave del capitalismo, que es asumir el riesgo”. “Este riesgo
debía ser abordado por ambas partes, y debía tenerse en cuenta el
crecimiento”, afirmó.
En ese sentido, destacó que se abordó la
negociación “recuperando el rol del Estado, que durante la década de los ’90
se pretendió prescindente de las políticas económicas”. Subrayó que el modelo
implementado desde 2003 “ha generado un crecimiento de casi el 80% de nuestro
Producto Bruto Interno”. “El mercado interno ha adquirido un desarrollo muy
importante. Tenemos los salarios más importantes de Latinoamérica”, señaló. Y
agregó que “paralelamente renegociamos nuestra deuda y comenzamos a pagar
nuestra deuda sin necesitar del mercado de capitales”.
La Presidenta destacó la decisión de “sostener la
demanda agregada, como una de las claves” del proceso de crecimiento, y al
respecto recalcó el aumento de inversión en obras públicas: “La Argentina en
materia de inversión en infraestructura ha crecido 28 veces desde 2001 a la
fecha”, afirmó.
Otro de los puntos destacados por Cristina
Fernández fue la decisión de “recuperar la administración de los recursos de
los trabajadores. Esto no solamente nos permitió tomar medidas muy
importantes desde el lado económico”, entre las que destacó un préstamo dado
a General Motors, sino que señaló que “la administración de recursos de los
trabajadores en manos privadas fue absolutamente ineficiente”. “Fue otro de
los mitos de los años ’90, sobre la pretendida ineficiencia del Estado y la
pretendida eficiencia de los privados. En algo más de dos años hemos
duplicado el fondo de garantías, cuando esos 90 mil millones se habían
conseguido en 14 años”, puntualizó.
La jefa de Estado sostuvo que “cuando decidimos
tomar los fondos que habían sido transferidos al sector privado, el Estado ya
le estaba pagando el 60% de las jubilaciones mínimas a los que estaban en las
AFJP”. “Además en estos años hemos incorporado más de 2 millones y medio de
jubilados y pensionados que carecían de cobertura, pese a haber ingresado en
la edad de derecho”, indicó.
Puntualizó que hoy se tiene “una cobertura de
casi el 90% de personas en edad de jubilarse, con dos aumentos al año, y que
nos ha convertido en el país con mayor desarrollo del sistema previsional en
América Latina”. Y resaltó que la decisión permitió “desarrollar el plan más
ambicioso en materia de cobertura social, como dijo Bernardo Kliksberg, que
es la Asignación Universal por Hijo, que hemos extendido a las embarazadas”
La Presidenta afirmó que “los gobiernos que
tenemos responsabilidades institucionales, tenemos que ver la lucha contra la
desigualdad, como una cuestión de afianzamiento de los procesos de
crecimiento económico”. “No hay sociedades que puedan crecer en forma
prolongada, si se profundiza la desigualdad”, enfatizó
Consideró que “es importante el tamaño de la
torta, pero también como se la reparte. Es importante que la torta llegue a
la mayor cantidad de gente posible, para que no se termine indigestando una
sociedad, pero tampoco la economía”.
Por otra parte, destacó la decisión de “utilizar
parte de las reservas disponibles” del Banco Central para el pago de la
deuda. “¿Qué lógica tiene que un país tenga reservas, por las que le pagan
0,5%, y tenga que salir al mercado a pedir deuda que se la dan al 13, 14 o
15%?”, se preguntó.
Señaló que pese a lo que se dijo en su momento se
pudo “llegar a mayor nivel de reservas, bajar el endeudamiento, y apagar el
rumor sobre las posibilidades de Argentina de pagar su deuda”. Indicó que
desde los fondos buitre “aumentaron el riesgo país, para aumentar las tasas,
pero sobre todo para escarmentarnos. Porque no podía ser que el peor del
grado fuera el que demostrara que podía pagar sus deudas”.
Asimismo, Cristina Fernández anunció que en junio
la recaudación impositiva fue de “más de 48 mil millones de pesos”. “Respecto
a junio del año pasado representa un aumento del 30,5%. Estamos en record
histórico de recaudación del impuesto al cheque, y record histórico de
derechos de exportación”, destacó y aseguró que las cifras “revelan la
solidez de un modelo”.
Por último, pidió a los economistas y presidentes
de bancos centrales reunidos en el acto “aconsejar a mandatarios y
funcionarios, pedirles salirse de las recetas tradicionales”. “Muchas de las
cosas que están ocurriendo son en definitiva anti-capitalistas. Si el
capitalismo pudo derrotar al comunismo, fue porque la gente quería consumir y
vivir como los del otro lado”, consideró.
La Presidenta detalló: “Cuando hablo de consumo
hablo de mejor calidad de vida. Hay más consumo de energía, porque hay más
gente que puede calefaccionarse a gas; porque hay gente que puede tener una
heladera o un lavarropas. Uno de los índices del crecimiento, puede verse en
la cantidad de ladrillos pegados uno sobre otro”. “Eso también impacta sobre
la actividad económica: son ladrillos, cemento, las chapas de los techos.
Este crecimiento, la mayor parte se ha debido al crecimiento de nuestro
mercado interno”, indicó.
Volvió a reclamar a los funcionarios “que piensen
que no hay sustentabilidad de los modelos económicos, si no hay
sustentabilidad social”. “Los grandes generadores de riqueza en el siglo XXI
van a ser los que tengan el conocimiento, la ciencia; y también los que
tengamos los alimentos, y la energía”, explicó. Y concluyó al decir que
espera “que hayamos aprendido algunas lecciones, y que cuando veamos al
enfermo le demos la medicación adecuada para volver a caminar”.
Jornadas Monetarias y Bancarias 2011
Durante las jornadas, que se iniciaron ayer, se
planteó como tema: «Políticas Monetarias y Balance de Pagos,
Reestructuración y Regulación Financiera. Hacia una Economía Sustentable y
más equitativa».
Participaron destacados expositores de la
Argentina y del exterior, se abordó un debate sobre la evolución de la crisis
global y se analizó especialmente la vinculación de la distribución del
ingreso con la sustentabilidad del crecimiento en el largo plazo.
Los distintos paneles y exposiciones fueron
organizados en función de un análisis crítico a las teorías predominantes en
el último cuarto de siglo y la propuesta de otras políticas, basadas en
evitar los fracasos que provocaron aquellas ideas.
El común denominador de las exposiciones que se
han presentado es que han tenido la capacidad de mirar la crisis desde una
posición alternativa a la corriente dominante del pensamiento económico.
La participación de especialistas nacionales y
extranjeros, así como de presidentes de bancos centrales de países de la
región, ha permitido fortalecer y consolidar las Jornadas que organizó el
BCRA como un ámbito de debate superador de las ideas que druante tanto tiempo
dominaron la discusión económica. |